A los del Ayuntamiento de esta bendita ciudad se les deben olvidar sus propias campañas. No encuentro otra explicación al hecho de que ahora mismo (casi las once) resuene, de forma atronadora, un concierto en el centro del barrio. Teniendo en cuenta que es domingo y que en poco más de un mes tendremos esto lleno de gente hasta la bandera gracias a las fiestas, pues igual estaría bien que pensaran en los vecinos currantes (no en los que están trabajando ahora mismo, como yo, sino en los que tienen que madrugar y quisieran un poco de paz para acabar el descanso del fin de semana). Pero, claro, se me ocurre también que igual a los turistas les gustan más los conciertos que los vecinos currantes. La culpa es nuestra por vivir en un parque temático.
Por otra parte, aquí sigo; con muchísimo trabajo y mucho atraso en el blog (una cosa lleva a la otra), contando los días para marcharnos a Bretaña, donde seguro que son infinitamente más cívicos que aquí. Es lo que tiene viajar, te da muchos argumentos para quejarte (y muchas ganas de emigrar).
Y, en otro orden de cosas, los Novelantes se reúnen el martes día 14 para comentar un libro que me ha gustado muchísimo, The Moonstone (La piedra lunar) de Wilkie Collins, considerada la primera novela policíaca. Qué maravilla de personajes. Da gusto que te recomienden un libro así. Me enganchó un montón y lo leí con auténtica ansia, ríete de la trilogía de Larsson. Hale, ya he acabado con una nota positiva mi derecho al pataleo expresado en forma de entrada.
Y, en otro orden de cosas, los Novelantes se reúnen el martes día 14 para comentar un libro que me ha gustado muchísimo, The Moonstone (La piedra lunar) de Wilkie Collins, considerada la primera novela policíaca. Qué maravilla de personajes. Da gusto que te recomienden un libro así. Me enganchó un montón y lo leí con auténtica ansia, ríete de la trilogía de Larsson. Hale, ya he acabado con una nota positiva mi derecho al pataleo expresado en forma de entrada.
1 comentario:
Como gracienco y habitante del parque temático, decir que también me siento afectado por el tema del ruido.
Lo que es peor, no es ya un problema de ruido sinó un tema de civismo. De la ausencia del mismo, más bien.
Y lo cierto es que si, lo de la emigración es un tema recurrente... Cuando estuvimos en Rep. Hrvatska, o en Slovenija, me pareció que -aunque no tan europeos como los europeos- ya nos daban mil vueltas. Igual no tanto.
Pero vete a Suecia, Francia, Alemania... Así daría gusto.
En fin, que empiezan las vacaciones dentro de nada, y que estas vacaciones están enfocadas como 'en busca de la tranquilidad, paz, sosiego y pararicos'. ¡Pinta bien!
PS: ¡ese libro me lo quiero leer yo también!
Publicar un comentario